El Club Deportivo Waterpolo Málaga quiere despedir el año en el Grupo B de Segunda Nacional con un buen sabor de boca. Como siempre lo ha hecho, con una sonrisa en la boca, a pesar de las dificultades de este año; tanto por la crisis de instalaciones para la disciplina del waterpolo, como por cuando han venido resultados en contra.

El último duelo, que además será en casa; en Carranque el domingo a las 16:00 horas, será todo un derbi andaluz, ante el Dos Hermanas. Un partidazo que abre la segunda vuelta, y que puede suponer la consolidación del juego de los malagueños, tras hacerse en casa con victorias de postín ante rivales siempre de la parte alta de la clasificación, como el Godella de Valencia, o el Poble Nou o el Vallirana de Barcelona.

Los de Wil Sánchez están muy confiados en el juego que están desplegando, con defensas auténticamente espectaculares, con intensidad, con goles cada vez desde más posiciones; y estando muy seguros en los momentos clave. El Dos Hermanas está empatado a puntos con los malagueños, diez, en una temporada en la que la igualdad es la máxima. De hecho, el CDWP Málaga está en penúltima posición, pero con tres victorias; y a solo cuatro puntos del liderato por ejemplo.

Por otro lado, la cantera también tiene fin de semana intenso; todo fuera de Málaga por la crisis de instalaciones en la ciudad para el waterpolo, teniendo los alevines que ir a Marbella y a Dos Hermanas, y los juveniles a Algeciras.